domingo, 19 de julio de 2009

«Me apena matar a mis personajes»


CULTURA
«Me apena matar a mis personajes»
La escritora francesa Fred Vargas presenta en Gijón su Inueva novela policiaca, 'La tercera virgen'
19.07.09 -
ÁNGEL FABIÁN
COLPISA. GIJÓN
La Semana Negra premia a David Torres y al argentino Guillermo Saccomano
Admiradora de Pedro Almodóvar, la escritora francesa Fred Vargas (París, 1957) no opina sobre su única novela adaptada al cine porque lo tiene «prohibido por contrato». Su serenidad y dulzura de carácter hacen pensar en cualquier cosa menos en el contenido de las novelas policiacas que la han llevado el éxito en toda Europa. Afirma que no tiene la menor intención de prescindir del comisario Adamsberg, protagonista de sus negrísimas novelas, porque «los héroes no pueden morir» y llega a confesar que le da «mucha pena» matar en la ficción a algunos de sus personajes.
Historiadora y arqueóloga, su verdadero nombre es Frédérique Andouin-Rouzeau. Su conocimiento de la Edad Media se refleja en algunas de sus novelas, aunque siempre están ambientadas en época contemporánea porque «no puedo concebir las tramas policiacas en momentos del pasado», dice. De hecho, manifiesta una clara aversión por la que denomina «novela histórica policiaca». Desde hace cinco años, se dedica casi exclusivamente a la literatura, aunque empezó a escribir «precisamente para evadirme del trabajo y de la historia». No obstante, incluye en sus novelas elementos históricos, como en su último libro, 'La tercera virgen', en el que hace una descripción de la propagación de la peste completamente histórica».
Vargas presentó ayer en Gijón, en el marco de la Semana Negra este libro, cuya versión española observaba ayer con asombro: «Este libro no es mío», dice al leer en la portada el título español de su original francés, 'Dans les bois éternels'.
Los premios
La Semana Negra de Gijón, la gran cita de este género literario, concedió ayer sus premios anuales, entre los que destaca el 'Hammet' a la mejor novela en castellano publicada durante el último año, que se reparten 'Niños de tiza', de David Torres, y '77', del argentino Guillermo Saccomano.
El premio 'Walsh' al mejor libro de no ficción ha sido concedido a 'La mala vida', de Carles Quílez, y el 'Espartaco' a la mejor novela histórica, a 'Salamina', de Javier Negrete. Willy Uribe obtiene el Memorial Silverio Cañada a la mejor primera novela negra publicada por un autor, en este caso 'Sé que mi padre decía'. Uribe (Bilbao, 1965), que quiso con esta obra poner su ciudad «en el mapa del género negro», comparte galardón con el mexicano Rogelio Medea por 'Conducir un tráiler'. Por último, el navarro Ismael Martínez Biurrún obtuvo el premio a la mejor novela de ciencia ficción por 'Rojo alma, negro sombra'.

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